miércoles, 29 de febrero de 2012

J.

« Ya vas comprobando que aunque no estudie filosofía, soy ciertamente filósofo. Y materializo mis palabras como un mero arpirante a poeta. Nada de literatura, me gustan la prosa corta y el verso libre. De orígenes científico-técnicos, muchas veces asoma mi mente pseudo-matemática, por muy evidente que sea que nunca fui el mejor de clase. Geometría aplicada o intersecciones de planos, puedes combinarlos con el gusto por la cocina creativa y la ropa con tacto suave y buen olor. Ciertamente cuidadoso con las cosas ordenadas, gusto de un buen té si va acompañado de una grata conversación. Demasiado hablador, quizá, pero volvemos a la filosofía. Acompañada, eso sí, de las mejores sonrisas. No obviaremos los días de bajón, me gusta llorar para vaciar presiones y malos sentimientos. Llorón por definición, no me gusta considerarme débil y tiendo a la cabezonería y tozudez en algunas ocasiones. Disfruto con el entretiempo, me gusta la lluvia y odio la nieve por lo caótica que resulta en los días después. Dormir es un placer, pero madrugo. Los días son más satisfactorios si los vives más horas. Y qué son las horas sino una cuenta atrás que nos lleva a mi mayor miedo, la muerte. Una muerte que me motiva a vivir mi día a día con la mayor de las pasiones, regalando cariño allá donde voy. Porque, aunque a veces no se cumpla, dar es recibir. Y, en esta vida, no estamos para perder los valiosos segundos de existencia.
Porque, ¿qué es la existencia sino pura filosofía en clave poética? »

miércoles, 22 de febrero de 2012

Skimia Japónica.


Mi bebé

lunes, 6 de febrero de 2012

Frío.


Fotografías por Javier Sendín.